Perdona nuestros pecados
Racing sufrió hasta el final pero le ganó a Estudiantes con gol de Lugüercio, un ex Pincha. Vivas ya le dio un perfil batallador al equipo, que hizo un buen primer tiempo. Ojo: la falta de luces con la pelota es un problema que puede complicarlo.Ese grito es único. No se parece a ningún otro. El desahogo de los hinchas de Racing, de los más sufridos del universo fútbol, es inconfundible. Es como un alarido que les sale desde el alma y les estalla en las gargantas. Un extraterrestre (aquel que no entienda tanta pasión puede sentirse tal) podría confundirse y creer que está ante una final. En realidad, para Racing son todas finales. Y ayer ganó una.
Ahora bien, el vapor de tanto fervor no debe nublar la vista. Racing sufrió hasta el último segundo para sentirse vivo. En los guantes del grandote De Olivera murió ese zurdazo poco convincente de Salgueiro que hubiera decretado el justo empate. Antes, Estudiantes lo había rodeado a pura circulación horizontal pero sin profundidad. Aun así, con la jerarquía de Verón, jugando de líbero detrás de Braña, el equipo de Sabella le había corrido el maquillaje a la imagen del primer tiempo de Racing.
Vivas ya acumuló un mérito: Racing se parece a un equipo. El técnico, pese al poco tiempo de trabajo, ya le dio un perfil: compromiso a full. Presión en todos los sectores, fundamentalmente en la salida de los defensores rivales mientras haya aire, aptitud y concentración para captar los rebotes (gol de Lugüercio) y muy pocas luces para controlar la pelota. Entonces, para modificar el concepto, habría que decir que Vivas tiene medio equipo. Al menos consiguió transmitir la primera parte del plan: orden y sacrificio. Al menos por ahora, ofensivamente se divorció de Bielsa: pelotazos largos para buscar y pelotazos largos para ahuyentar cualquier peligro. Y la otra parte del divorcio habría que buscarla en el sistema, Vivas se acomoda a lo poco que le dejó Caruso y, por ahora, parece no priorizar su dibujo por encima de los nombres. De todos modos, Vivas está ante un gran desafío: así como hay jugadores de entrenamientos, hay técnicos de entrenamientos, que se destacan por sus trabajos y búsquedas en la semana más que por sus éxitos e influencias en los partidos. Vivas, hasta que demuestre lo contrario, parece uno de ellos.
Racing no tendrá a otros Estudiantes por delante. A un mes del Mundial de Clubes, el campeón de América parece en otra cosa. Se dejó incomodar al principio y cuando aceleró, ya no tenía piernas. A Racing y a Vivas todavía les falta recorrer un largo camino. Mientras tratan de correr las espinas, ayer recogieron las primeras flores.
Fuente: Olé
Currently have 0 comentarios: